1

Terminar en una prisión secreta de máxima seguridad en el Océano Pacífico no estaba en mi lista de deseos. Tampoco que el torturador jefe de dicha prisión me pusiera patas arriba todo el mundo. Aunque supongo que la vida sería aburrida sin un poco de emoción, aunque violenta.
Solo necesito ser paciente y esperarlo.
Creen que pueden quebrarme. Creen que pueden hacerme hablar. Creen que voy a estallar. Bueno, qué bromas. Me niego a doblegarme. Me niego a romperme. Me niego a morir; no aquí, no así. Tengo demasiado que proteger como para ser otra cosa que impenetrable. Pero, si alguien puede hacerlo, es él ... el de la máscara sin boca, a él es a quien hay que vigilar.
Estoy esperando el momento oportuno. Viene por mí.
¿Quién llegará primero?
No hay comentarios:
Publicar un comentario