Casamiento concertado, obligada a quedarse...
CARA
La vida nunca ha sido fácil, pero ha sido aún más difícil desde que mamá enfermó. Vivir en nuestra granja y encargarme de las facturas médicas de mamá me ha dejado desesperada por dinero. Cuando mi distanciado padre sugiere que me case con un capo irlandés, sé que no tengo otra opción, especialmente con la promesa de pagar las facturas de mamá. Pero tengo un secreto que le estoy ocultando a mi prometido, Declan Sullivan: no puedo quedar embarazada. Entonces le hago un trato: si no estoy embarazada a los seis meses de matrimonio, tiene que dejarme ir. ¿Pero lo hará?
DECLAN
Le hice una promesa a mi padre en su lecho de muerte: que me casaría y tendría un heredero. Cara Gallagher es mucho más joven, pequeña y hermosa, pero también frágil. No puede manejar a un hombre como yo. Pero ninguno de los dos tiene otra opción en el asunto. Especialmente cuando conozco a la preciosa pequeña belleza de cabello negro y empiezo a desear cada vez más su inocencia... Piense lo que piense, mi anillo nunca abandonará su dedo. Ella es mía para conservarla... Y mía para romperla.
Empezó con un beso y acabó con un baño de sangre...
Renzo.
Giulia Accardi pertenece a una familia mafiosa rival, lo que significa que debo mantenerme alejado a cualquier precio.
Pero su belleza e inocencia me impiden mantenerme alejado; deseo lo que no puedo tener.
Sin embargo, Giulia nunca se arrodillará ante alguien como yo.
A menos que la engañe para que me dé su inocencia...
En cuanto sea mía una vez, lo será para siempre.
Dicen que nunca se olvida la primera vez... Giulia seguro no lo hará, porque tengo la intención de ser su última vez, también.
Giulia.
Besé a un hombre que no debía besar durante una boda. Fue salvaje, apasionado, y volaron chispas... Hasta que un grito espeluznante nos interrumpió.
Ahora alguien está muerto, y yo soy culpable de colaborar con el enemigo.
Sé que debo alejarme de Renzo Bernardi, pero es más fácil decirlo que hacerlo...
Y después de una apasionada noche juntos, no hay forma de huir de lo que he hecho.
Acabo de entregar mi cereza a un hombre que debería odiar.
Y ahora él no me deja ir.
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