Nadie la va a convencer de que se enamore de nuevo...
Ryder Colburn está muy ocupado dirigiendo el negocio familiar y cuidando a su padre enfermo, un completo desconocido para él, el hombre frío y autoritario que solía ser. No tiene tiempo libre para aficiones ni para mujeres. O eso cree hasta que una aparece en su vida... y en el camino de un coche que se aproxima.
A Ryder no le importa ser el héroe de Penny, la chef asustadiza y llena de cicatrices. Quizás sean los secretos de sus ojos o la cicatriz de su barbilla. Sea cual sea el motivo, se siente obligado a acercarse.
Penny ha aprendido la lección y ahora está pagando el precio. Por eso comparte una casa ruinosa en un pequeño pueblo de California con su enérgica abuela y su hermano adolescente, que viven de las sobras de su trabajo de catering. Está muy lejos de la vida de sus sueños. Pero, ¿quién necesita sueños... o amor... o sexo cuando hay proyectos de fontanería amateur que abordar y guisos de desayuno que hornear?
Una cosa es segura: nunca volverá a enamorarse. Ni siquiera del contratista sexy y sarcástico que no deja de poner a prueba los muros que ha construido.
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