A Ama Torres le encanta ser organizadora de bodas. Pero con una madre que se ha casado más veces de las que se pueden contar con los dedos, Ama ha decidido que el matrimonio no es su camino. ¿Pero las bodas? Las bodas son increíbles. Como propietaria de una pequeña empresa, sabe cómo poner en contacto a sus clientes con el proveedor perfecto para que tengan la boda de sus sueños. Bueno, casi perfecta…
Elliot odia ser florista, la mayor parte del tiempo. Cuando su padre le dejó la floristería, lo consideró una carga, pero se ha quedado con ella. Igual que se quedó con la forma en que se declaró a Ama, su principal colaboradora y novia (¿o lo era?) hace dos años. Pero las flores han crecido en él, igual que Ama. Y las flores no pueden huir y no volver a dirigirle la palabra, como hizo Ama.
Cuando Ama es contratada para organizar la boda de unas famosas que dará a conocer su negocio en todo el país, hay un problema: Elliot ya ha sido contratado para diseñar las flores. Las dos novias, que ven la evidente química entre Ama y Elliot y están decididas a tenderles una trampa, sin conocer su complicada historia, no ayudan en nada. Si a eso le añadimos una exjefa entrometida y un equipo de rodaje de un reality documentando cada paso de los preparativos de la boda, los corazones de Ama y Elliot no solo vuelven a estar en peligro, sino que esta vez también lo están sus medios de vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario