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Laura Young está atrapada en una tormenta.
Después de que un trágico accidente deje a su madre en coma, se centra en la felicidad de su vida: sus dos mejores amigos y su hijo de cinco años.
Lo que Laura necesita es un poco de buena suerte.
Lo que consigue es al capitán de los New York Nighthawks, Alec Kostelecky, un fantasma de su pasado.
Con unos cautivadores ojos color avellana y un cuerpo que exhibe su dedicación sobre el hielo, Alec es el sueño de cualquier chica. Es apasionado y cuando quiere algo, va a por ello. Cuando un encuentro fortuito vuelve a reunir a Laura y a él, Alec se niega a dejar que se le escape de las manos, como ocurrió años atrás.
Puede que todas las chicas del mundo quieran llamar suyo a Alec Kostelecky. Pero no todas las chicas lo conocieron a los quince años. No todas las chicas se quedaron embarazadas de la infame estrella de la NHL y tuvieron que criar a su hijo ellas solas. Y no todas las chicas son capaces de ponerlo de rodillas.
Cuando el amor perdido se reaviva y salen a la luz verdades retorcidas, Laura se cuestiona todo lo que creía saber. Y nada es seguro hasta que la primera gota de lluvia cae por su mejilla.
Laura Young está atrapada en una tormenta.
Después de que un trágico accidente deje a su madre en coma, se centra en la felicidad de su vida: sus dos mejores amigos y su hijo de cinco años.
Lo que Laura necesita es un poco de buena suerte.
Lo que consigue es al capitán de los New York Nighthawks, Alec Kostelecky, un fantasma de su pasado.
Con unos cautivadores ojos color avellana y un cuerpo que exhibe su dedicación sobre el hielo, Alec es el sueño de cualquier chica. Es apasionado y cuando quiere algo, va a por ello. Cuando un encuentro fortuito vuelve a reunir a Laura y a él, Alec se niega a dejar que se le escape de las manos, como ocurrió años atrás.
Puede que todas las chicas del mundo quieran llamar suyo a Alec Kostelecky. Pero no todas las chicas lo conocieron a los quince años. No todas las chicas se quedaron embarazadas de la infame estrella de la NHL y tuvieron que criar a su hijo ellas solas. Y no todas las chicas son capaces de ponerlo de rodillas.
Cuando el amor perdido se reaviva y salen a la luz verdades retorcidas, Laura se cuestiona todo lo que creía saber. Y nada es seguro hasta que la primera gota de lluvia cae por su mejilla.
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