La vida de Jak tiene un solo sentido; romper la maldición o morir en el intento.
La vida de Marius no tiene sentido; no desde que fue maldecido en la retorcida criatura sedienta de sangre de la noche.
Durante años, las brujas han esperado su salvación, una forma de devolver la magia que se sacrificó cuando se lanzó la maldición por primera vez. Jak, un niño nacido con un poder que las brujas no han visto en un siglo, es su salvador profetizado. El que debe matar a la criatura, romper la maldición y restaurar la magia a su aquelarre.
Enviado al castillo de la criatura como reclamo final, Jak debe acercarse lo suficiente para asestar el golpe final. Es lo que ha entrenado toda su vida para lograr.
No todo es lo que parece cuando Jak descubre secretos y verdades a medias. La criatura no es la bestia inquietante que le habían enseñado a odiar. Las emociones luchan a medida que se descubren nuevos sentimientos. ¿Qué es más peligroso que el odio? Lujuria.
Humano. Arlo Grey hará lo que sea para defenderse de la enfermedad que ansía destruirlo. Para mantener la promesa que hizo a sus padres, asegurando la protección de su hermana del mundo y sus peligros. Especialmente si los peligros vienen en forma de elfos de un reino más allá del mundo humano.
Elfo. Faenir Evelina es despreciado por el asesinato de su familia. Obligado por la amargada reina a participar en la Elección, descubre a una única persona que puede resistir la gracia mortal de su tacto.
Han pasado muchos años desde que la enfermedad vampírica se extendió salvajemente por Darkmourn, convirtiendo a los humanos en una rareza. Y la protección contra los no muertos tiene un coste, uno que Arlo se ve obligado a pagar cuando es robado por el Príncipe de la Muerte.
Arlo se encuentra enredado en una red de secretos, política familiar y magia desenfrenada cuando se enfrenta cara a cara con la inminente perdición... su verdad.
King of Immortal Tithe es una novela completa, M/M *stand-alone novel*, inspirada en Hades x Perséfone... pero si Hades se enamorara del hermano de Perséfone en su lugar.
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