Educada en casa y bajo el control sofocante de un padre sobreprotector, la vida de Talia Fielding es bastante miserable. Tocar su amado ukelele y escribir canciones es lo más cercano a divertirse. Pero todo eso cambia la noche de su decimoctavo cumpleaños. La invitan a su primera fiesta donde aprende dos cosas: las chicas pueden ser muy, muy malas y Griffin Stanford besa mejor que cualquier fantasía que haya tenido.
Para la mayoría de sus amigos, Griffin Stanford es la hermosa estrella del fútbol. Sin embargo, bajo esa buena apariencia se encuentra el corazón de un nerd. Su pasión por los números le ha asegurado un trabajo que cambiará su vida nada más salir de la universidad. El contrato que firmó lo tiene abordando un avión al otro lado del mundo a la mañana siguiente de conocer a la chica de sus sueños.
La atracción obsesiva que siente Griffin hacia Talia lo hace cuestionar las elecciones de su vida. Una noche, un beso y Griffin sabe que esta puede ser su única oportunidad de capturar a la chica perfecta... ¿Cómo puede evitar que se le escape entre los dedos cuando el mundo parece decidido a mantener separados a estos dos vírgenes?
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