Conocerlo no formaba parte del plan...
Tras años de trabajar como una esclava para su malvada madrastra, Ember Oliphant está a punto de convertir sus sueños en realidad. Todo lo que tiene que hacer es asistir al baile de máscaras usando sus zapatillas grabadas a mano y convencer al señor DeVille, un famoso industrial, para que las fabrique. Si lo consigue, podrá controlar su futuro y así construir su “felices para siempre”.
Cuando Maxwell DeVille llega hasta las Tierras Altas de Escocia para dirigir una de las fábricas de la poderosa familia Prince, se siente como si fuera un miembro de la realeza. ¡Incluso, han organizado un baile en su honor! Convencido de que es una exageración, cambia de opinión cuando baila con una enigmática y bella joven... pero, antes de que pueda saber su nombre, ella se marcha, dejándole solo con una exquisita zapatilla para recordarla.
Hechizado por su belleza y gracia, Max está decidido a encontrar a su misteriosa dama. Pero su búsqueda se ve pronto eclipsada por la fascinante Ember, una de las sencillas criadas de la posada.
¡Con una inteligencia a la par de su belleza, es mucho más interesante que su elegante princesa!
Y, a medida que Ember conoce al dulce y reflexivo Max, comienza a reconsiderar sus sueños. Lástima que él no pueda ayudarle a conseguir su contrato con Grabados Oliphant... así podría ser feliz para siempre.
Pero cuando “Max” aparece sosteniendo su zapatilla perdida, se da cuenta de que todo el tiempo le ha estado mintiendo.
Gracias a las máscaras que ambos usaron, Max empieza a sospechar que se ha enamorado de la mujer equivocada.
Cuidado: Se van a necesitar unas cuantas madrinas entrometidas, un calzado poco factible, ¡y mucha causalidad narrativa para solucionar este lío!
Ella necesita su ayuda para ir en busca de la esfera dorada… ¡Lástima que él sea un sapo!
Vanessa Oliphant ha sido acusada de ser una joven vanidosa, pero, ¿quién podría culparla? ¡Todo el mundo dice que es la chica más bella que ha nacido en toda una generación de Oliphant!
Desde el día en que nació, su madre le ha dejado muy en claro que su belleza la ha destinado a la grandeza.
Y, la “grandeza” en la que Vanessa ha puesto su corazón es Roland Prince, Vizconde de la localidad e hijo del actual Laird. Él es encantador y dulce, y tan guapo que hace que sus rodillas se vuelvan débiles.
Pero desde que Roland la escuchó chismeando sobre su hermano, ya no quiere saber nada de ella, obviamente.
Al darse cuenta de que no es –ni quiere ser– ese tipo de persona, Vanessa se embarca en una aventura para encontrar un antiguo objeto romano particularmente valioso; un objeto que puede ayudar a su hermana. Si puede recuperar la Esfera de Oro, le demostrará a todos –incluso a sí misma– que no es tan egocéntrica como suelen pensar las personas. Pero, como no puede ir sola, le solicita ayuda a un extraño sorprendentemente intrigante: Monsieur Grenouille.
Este misterioso “Señor Sapo” no es otro que Roland disfrazado –por supuesto– porque así es como funcionan los cuentos de hadas, ¿o no lo sabías? Él está decidido a demostrarle a Vanessa el valor de la belleza interior, aunque tenga que humillarla para lograrlo. Pero, mientras emprenden el viaje en busca de la esfera dorada, Roland comienza a sospechar que, quizás, la ha juzgado mal.
¿Qué sucederá cuando él comience a regatear su beso?
Ella es la dueña de una editorial y él posee una biblioteca que nunca ha podido olvidar… ¡Escondida en un castillo agorero y espantoso!
Bonnie Oliphant ha tenido que soportar interminables burlas en su búsqueda por poseer su propia editorial. Pero ahora que ha alcanzado su sueño, no logra encontrar autores que estén dispuestos a permitir que sus obras sean publicadas por una mujer. En su desesperación, recurre al cuñado de su hermana, el melancólico y salvaje heredero del laird.
Lyon Prince es conocido como la “Bestia de los Oliphant" y por una buena razón. Desde que perdió a su esposa –y gran parte de su rostro– en un incendio, se encerró en su castillo solo con unos cuantos acompañantes, con la intención de entrenar su maltrecho cuerpo para, así, recuperar su antigua fuerza. Todos saben que no es una buena compañía, por lo que se sorprende cuando una jovencita bella y muy decidida aparece en su puerta y le pide tener acceso a su preciada biblioteca.
Quizás, debió haberse puesto unos pantalones.
Cuando una tormenta de nieve los deja atrapados en el viejo castillo, Lyon queda desconcertado al darse cuenta que está comenzando a GUSTARLE a Bonnie. Ella es hermosa, sí, pero también es notoriamente comprometida y una de las personas más ingeniosas que ha conocido. Y no solo disfruta del tiempo que pasa a su lado… sino que se está enamorando de ella, y eso es algo que no puede ocurrir. Después de todo, ¿qué oportunidad podría tener una bestia con una joven tan hermosa como ella?
Afortunadamente, lo sepa Lyon o no, tiene a la extremadamente extravagante Hermandad de Madrinas de su lado, las que están decididas a darle su “felices para siempre” a esta “bestia”... ¡Con editorial y todo!
Advertencia:
Contiene más kilts de lo que se supone debería tener un romance de la época victoriana, pero, ¿quién podría quejarse? Además, están las típicas travesuras de las madrinas, y más que un poquito de Causalidad Narrativa.
Gracias a BL
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